viernes, 25 de marzo de 2011

Imagina

Ver cómo personas que nunca pensaste que entrarían en tu vida, lo han hecho, y lo han hecho de una forma tan fuerte y potente que, aunque no sepas dónde están, qué están haciendo o pensando, les recuerdas, y recuerdas todo momento que has pasado con ellos y te das cuenta de que, a pesar de que hace tiempo que no sabes nada de sus vidas, les quieres más que a nadie, que no hay personas en el mundo comparables con ellos.

Aquellas que han calado tan hondo en tu vida que sabes que podrías estar horas hablando por teléfono sin decir absolutamente nada coherente, que con sólo verles, aunque sea por videoconferencia, te dibuja una sonrisa en la cara tan grande como el abrazo que les darás al volver a reunirte con ellos. Personas sin las que no te puedes imaginar, que adoras y quieres que permanezcan en tu vida aunque la maldita desitancia os separe. Distancia que hará aún más fuerte vuestra amistad.

Personas que cuando te conocieron pensaron que eras una borde, que eras adorable, que eras divertida, que no querían volver a verte... Personas que siempre han estado ahí pero nunca te habías dado cuenta, y personas con las que empezaste con mal pie. Todas ellas, a día de hoy, forman parte de mi vida y cuya sola existencia me reconforta a diario. Personas que en cuestión de días se han convertido en lo más importante.

A todos ellos hoy les doy las gracias y les pido que, si pueden, se imaginen lo muchísimo que les quiero.

domingo, 20 de marzo de 2011

¡Despierta!

Ya es hora de que dejes de soñar que vives y empieces a vivir tus sueños. Sentada en un sillón imaginando como sería tu vida si hubieses elegido otro camino que seguir, aún no es tarde pero no vivas en el pasado. Si te pasas toda tu vida organizando cómo será, llegará el fin de tus días y solo habrás hecho eso... Soñar.
Hemos conocido a muchas personas a lo largo de todos estos años; hemos reído, hemos bailado, hemos besado, hemos llorado, hemos caído...pero aqui estamos recomponiendo el puzzle pieza a pieza y día tras día.
Supongo que una llega a este tipo de conclusiones cuando se cansa de escuchar cómo otras personas creen estar haciendo lo que quieren... Querer... Pocas personas a día de hoy tienen realmente claro lo que quieren.
¿Qué quieres?... Confieso que en mi caso hay una mayoría clara en que "No sé" ha sido mi respuesta. Creemos que tenemos claro lo que queremos y organizamos nuestra vida en base a ello. Pero, ¿qué pasa cuando lo consigues?, ¿acaso tu vida deja de tener sentido? o ¿te limitas a vivir día tras día consolandote porque, oye, lo conseguiste?
La vida no consiste en seguir un camino predeterminado, ese camino lo vas creando tú a medida que avanzas, y llegarán bifurcaciones que te harán dudar pero tendrás que tomar una decisión y será mejor o peor, pero será tu elección y siempre te llevará a maravillosos momentos.

No lo planifiques, vive el momento, la felicidad reside en el presente, en el ahora, el pasado queda atrás y el futuro aún no es problema.

lunes, 14 de marzo de 2011

Arrepentimiento

Todos nos hemos arrepentido alguna vez por algo que hemos dicho, por algo que hemos hecho, pero lo peor de todo, y no me cabe ninguna duda, es que todos y cada uno de nosotros se arrepiente de haber dejado escapar una oportunidad.
No hemos aprovechado el momento, no nos hemos arriesgado, no hemos dicho algo que queríamos decir, algo que, aunque sabías que debías hacerlo, no lo has hecho. Normalmente eso suele pasarnos con las personas a las que más queremos, por miedo a perderlas, por miedo a hacerles daño...todo por miedo.
Hace poco me pasó, una muy buena amiga mía depositó toda su confianza en mí. Por circunstancias que me superaron fui incapaz de decirle algo que ella debía saber, algo que yo tenía que contarle... Lo hice, pero no a tiempo, no lo hice en su momento, me sentía tan segura con ella, tan tranquila, tan igual, que cuando llegó la hora de actuar de verdad como una amiga, me acobardé. Tenía miedo de perderla. Cometí un error por miedo.
Esto me llevó a plantearme cómo todos hemos cometido ese tipo de error alguna vez, quizás no del mismo modo que yo lo hice, y el ejemplo más claro es cuando esa persona que nos quita el sueño, que vemos día a día, que nos hace reír, que poco a poco va entrando en nuestras vidas...se aleja. A medida que pasa el tiempo vemos más y más difícil decirle todo lo que pensamos, todo lo que sentimos, incluso a veces a nosotros mismos nos cuesta darnos cuenta pero en el fondo sabemos que está ahí, ese sentimiento, esa atracción, esa afinidad...
La experiencia, y no hablo solo de la mía, me refiero a todas las personas que, a mi alrededor, han dejado escapar ese tren por miedo a decir "¿Por qué no lo intentamos?", "Me gustas más de lo que pensaba",  "Me encantaría pasar más tiempo contigo" , "Te quiero"o "Lo siento", me ha demostrado que aferrarse en  la soledad de uno mismo no sirve para nada, debes decírselo. Es posible que lo pases mal, como en cualquier decisión que tomes en esta vida, pero también es posible que te lleves una muy grata sorpresa y esa persona reaccione de la manera que esperabas. No dejes que tu vida se llene de "Debería haberle dicho..." que la vida es muy corta y no nos lo podemos permitir.
La sinceridad es un valor muy importante en el ser humano y todas las relaciones que tenemos se basan en ella junto con la confianza. En toda relación debemos decir la verdad, lo que pensamos, lo que sentimos, lo que ha pasado, por daño que pueda hacerle a esa persona ya que ese tipo de realción estrecha, llámese amor, llámese amistad no tiene sentido sin ninguna de las anteriores.
Como dice el refrán: Quien bien te quiere, te hará llorar porque te dirá la verdad por dolorosa que sea, y en eso se basa una verdadera amistad.

miércoles, 9 de marzo de 2011

Hablando con propiedad

Alguien me dijo una vez que no podría vivir sin mi sonrisa. Mentira. Hace tiempo que no me ve sonreír, me ha visto llorar, y aún así, ha seguido respirando. ¿Por qué nos empeñamos en hacer indispensable algo exterior con respecto a la continuidad de nuestras vidas? Si alguien te dice que no puede vivir sin ti, miente, es posible que no mienta adrede, es más, es incluso posible que crea las míseras palabras que están saliendo de su boca. Aún así, miente. Esa persona ha vivido antes de conocerte, ha sido feliz y su existencia y/o felicidad no dependen ni de tu existencia, ni de tu sonrisa e incluso a veces ni siquiera de tu compañía pero si que es posible, e incluso estoy de acuerdo, que tu compañía, existencia, felicidad, sonrisa… hacen más fácil la felicidad de otros, aún así no es un factor imprescindible. Todos hemos perdido a personas importantes en nuestras vidas: Un familiar, un amigo, un amante… Bien lo hemos perdido por la confusa pero inequívoca astucia de la muerte, o por la distancia, o porque esa persona ha decidido alejarse de nuestras vidas … No sé exactamente cuál de estas duele más. La muerte es algo que no está planeado y sabemos que nunca volveremos a ver a esa persona, pero la huída… nos hace pensar que somos responsables…. El tema es que aunque esas personas se hayan ido, de un modo u otro, seguimos adelante y tarde o temprano volvemos a esbozar una sonrisa, recordando algo que dijo, hizo… En definitiva, si en alguna ocasión has sentido la necesidad de decirle a una persona que no PUEDES vivir sin mirarle a los ojos cada día, sin hacerle sonreír, sin decirle “te quiero”, sin abrazarle, sin sentir su calor y cariño… No mientas, dile que no QUIERES vivir sin mirarle a los ojos cada día, sin hacerle sonreír, sin decirle “te quiero”, sin abrazarle, sin sentir su calor y cariño… No le digas que no puedes vivir sin ella, dile que simplemente no quieres hacerlo.